LAS VIUDAS DEL DIA DEL TRABAJADOR

 

Somos las esclavas de los esclavos. Nos explotan más despiadadamente que a los hombres. (Lucy González de Parsons, 27 de junio de 1905). Viuda de Albert Parsons, uno de los Mártires de Chicago.

Somos las esclavas de los esclavos. Nos explotan más despiadadamente que a los hombres. (Lucy González de Parsons, 27 de junio de 1905). Viuda de Albert Parsons, uno de los Mártires de Chicago.

Todos sabemos que el 1 de mayo es el Día Internacional del Trabajador.

El  4 de mayo de 1886 tuvo lugar el incidente de Haymarket Square (Chicago, Estados Unidos), punto álgido de una serie de protestas que desde el 1 de mayo se habían producido en respaldo a los obreros en huelga, para reivindicar la jornada laboral de ocho horas. Durante una manifestación pacífica en Hydemarket, cuando la mayoría de la gente ya se había retirado, una persona desconocida lanzó una bomba a la policía que intentaba disolver el acto de forma violenta. Esto desembocó en un juicio, años después calificado de ilegítimo y deliberadamente malintencionado, hacia ocho trabajadores anarquistas, donde cinco de ellos fueron condenados a muerte (uno de ellos se suicidó antes de ser ejecutado) y tres fueron recluidos. Fueron denominados Mártires de Chicago por el movimiento obrero.

Si leemos las crónicas de aquellos violentos días que dieron origen a la conquista de derechos y vemos los grabados en toda la prensa parece que solamente intervinieron hombres en aquellos días que marcaron la historia, un antes y un después en los derechos de los trabajadores.

Grabado de la explosión durante la revuelta de Hydemarket

Grabado de la explosión durante la revuelta de Hydemarket

De soslayo en prensa y solo en determinadas publicaciones se habla de las viudas, madres, hijos e hijas de los denominados Mártires de Chicago. Como sufrientes y desvalidos personajes de aquellos trágicos días. ¿Es real esa imagen histórica?.

Los denominados Mártires de Chicago y sus condenas fueron:

Los Martires de Chicago

Los Martires de Chicago

A muerte

  • George Engel, alemán, 50 años, tipógrafo.
  • Adolf Fischer, alemán, 30 años, periodista.
  • Albert Parsons, estadounidense, 39 años, periodista. Esposo de la mexicana Lucy González Parsons aunque se probó que no estuvo presente en el lugar, se entregó para estar con sus compañeros y fue juzgado igualmente.
  • August Vincent Theodore Spies, alemán, 31 años, periodista.
  • Louis Lingg, 22 años, carpintero. Para no ser ejecutado se suicidó en su propia celda.

Prisión

  • Samuel Fielden, inglés, 39 años, pastor metodista y obrero textil, condenado a cadena perpetua.
  • Oscar Neebe, estadounidense, 36 años, vendedor, condenado a 15 años de trabajos forzados.
  • Michael Schwab, alemán, 33 años, tipógrafo, condenado a cadena perpetua.

Las condenas fueron ejecutadas el 11 de noviembre de 1887.

Las mujeres evidentemente estuvieron presentes, la propia historia remarca que la primera revolución industrial fue realizada por mujeres y niños (que trabajaban en las peores condiciones). Además en aquellos momentos en EEUU las mujeres solian trabajar de noche para conseguir un sobresueldo.

En el momento de los aconteciemientos de Hydemarket Albert Parsons y su esposa Lucy Parsons estaban reunidos en asamblea con un grupo de mujeres que trabajaban en la industria textil. Como  estas jornadas de huelga fueron impulsadas por los emigrantes habia poca gente que pudiera realizar un buen discurso en lengua inglesa, y algunos compañeros se acercaron a llamar a los Parsons. Todos, los hombres y mujeres, reunidos allí se dispusieron a acudir, aunque no llegaron a tiempo.

Lucy Parsons arrestada en 1915 por las manifestaciones del 12 de febrero.

Lucy Parsons arrestada en 1915 por las manifestaciones del 12 de febrero.

Lucy Eldine González Parsons (1853-7 marzo de 1942) nació esclava, hija de  una mexicana negra y un mestizo de la nación indígena Creek.

En 1870 habia conocido a Albert Parsons con el que pronto se casaría. Tuvieron que casarse ilegalmente por las leyes contra la mezcla racial.

Por lo que tuvieron que huir de Texas a Chicago bajo amenazas. Durante toda la vida de su marido y durante el juicio, Lucy Parsons fue una activista. Las crónicas relatan que al ser proclamada  la sentencia de muerte en la horca, Lucy cogió las cuerdas de las cortinas de la sala del juicio y las lanzó como sogas por la ventana para que la multitud que estaba fuera esperando supiese el resultado del juicio era la pena de muerte.

Durante el resto de su vida continuó siendo una dirigente laboral radical y una anarquista comunista, que ha pasado a la historia como una gran oradora y una de las mujeres más influyentes de su tiempo.

NIna Van Zandt

NIna Van Zandt

Nina Van Zandt, era una rica heredera que acudió al juicio. Durante el proceso ella misma afirmó: » Yo no conocia a ninguno de los acusados, cuando, durante la comedia llamada juicio, entré en la sala de sesiones. No tenía acerca de los presos más noticias que las que traian los diarios; así es que esperaba ver a unos hombres estúpidos, viciosos y de aspecto patibulario. !Cuál no fue mi sorpresa al ver que, lejos de corresponder a esta descripción, eran inteligentes, bondadosos y de aspecto simpático!.» Empezó a interesarse y pronto se dió cuenta de la intención por parte de las autoridades de condenarles. Se situó cerca de ellos en el juicio y comenzó a simpatizar con ellos, se enamoró de August Spies. Se casaron por poderes y solo se veían a través de los barrotes de la celda. Spies escribió en la carcel su autobiografía y otros escritos con la colaboración y el apoyo de su esposa.

Eda Muller fue otra joven, hermosa y elegante, que se enamoró de Lingg. Le apoyó durante el juició hasta que se suicidó en su celda para no ser ajusticiado, Eda también colaboró estrechamente en sus escritos. De ella no aparecen fotos y la historia recoge solo estos datos.

Estas tres mujeres son solo una muestra de las mujeres luchadoras que no han sido reivindicadas en la Historia Mundial.